El encuentro fue propiciado por la titular del Juzgado Civil y Comercial N° 7, doctora Liliana Reina; y participó la doctora Raquel Monzón Gramajo, a cargo de la Dirección de Mandamientos y Notificaciones, como también personal de ambas dependencias.

La reunión, realizada en la sede del Juzgado, tuvo por objeto conocer las necesidades que surgen en cada etapa del proceso–desde la generación hasta la ejecución propiamente dicha ¿- de la orden judicial. También, conocer las experiencias motivadas en las exigencias de la función, planteándose la necesidad de relacionar tareas y modalidades de trabajo para que, a través del intercambio de información y articulación de acciones, se potencien las intervenciones para que resulten más efectivas.

Con esa impronta, los oficiales de justicia y notificadores comentaron las características de su trabajo describiendo las situaciones cotidianas qué deben afrontar y las dificultades que en muchas ocasiones entorpecen su tarea.  También relataron los distintos escenarios donde deben concretarse las diligencias (barrios privados, edificios, barrios de INVICO, asentamientos, zonas rurales, edificios públicos, entre otros) y los condicionamientos que cada uno de ellos imponen en el cumplimiento de la función, y justificaron la necesidad de que las mandas judiciales reúnan determinadas características y precisiones según el domicilio del destinatario.

El personal del juzgado se mostró sorprendido en algunos casos al conocer las situaciones que se plantean qué no siempre se ven reflejadas en los expedientes.

Esta dinámica grupal aportó significativamente para la reflexión sobre las tareas y la comprensión de que las acciones desarrolladas en el ámbito de cada una de las oficinas se encuentran interrelacionadas y constituyen etapas de un único proceso. Permitió además identificar los factores que influyen en el obtención del objetivo final –cumplimiento de la orden judicial- así como en los contextos en que ello ocurre, lo que llevó a los asistentes a coincidir en la necesidad de favorecer la reorientación de las propias prácticas laborales. La finalidad es la mejora continua de la gestión y ofrecer un servicio de justicia de manera más eficiente.

Finalmente, los participantes concordaron en que la experiencia fue muy enriquecedora y aseguraron que se lograron compromisos concretos a fin de alcanzar una comunicación fluida y efectiva que asegure la pro-actividad en el proceso de generación y ejecución de las órdenes, orientado al cumplimiento efectivo del objeto pretendido por la jurisdicción según las particularidades del caso.