El Poder Judicial elevó al Ejecutivo y al Legislativo la Memoria Anual, en la que se condensa la actividad desplegada a lo largo del año 2010. A pesar de reconocer la imposibilidad del cumplimiento de algunas de las metas proyectadas, para la Justicia el saldo es positivo.
La política diseñada por la actual integración del Superior Tribunal se asienta sobre tres aspectos entendidos como base para el crecimiento del mismo y el desarrollo del nuevo concepto con que debe ser apreciado en su diagrama institucional. Esos aspectos son la infraestructura edilicia, la informatización y los recursos humanos.
En relación a
Se efectuaron obras de infraestructura nuevas en materia edilicia, se continuaron con las iniciadas, dotando a Magistrados, Funcionarios y Agentes de las condiciones de seguridad y comodidad absolutamente necesarias para el mejor cumplimiento de sus obligaciones.
En materia de Informática se integró judicialmente a
En materia de Recursos Humanos se consiguió aumentar la dotación en cuanto a Funcionarios y Agentes Administrativos y de Maestranza, dando así respuestas mínimas a las requisitorias de las distintas dependencias judiciales. Pudo también implementarse el proyecto de redistribución de cargos administrativos, y se efectivizaron más de mil movimientos escalafonarios, lo cual representa esto una mejora salarial para más de setecientos agentes. Esta actividad se llevó adelante mediante la realización de concursos lo que también demandó erogaciones que se cubrieron, en algunos casos, postergando proyectos que se entendieron de menor urgencia.
La deuda más grande estuvo en la imposibilidad de cumplir con la puesta en funcionamiento de dependencias que, creadas por ley, no cuentan todavía con los recursos necesarios como para funcionar. Ello impidió la incorporación de recursos humanos en la medida que hubiera sido deseable.
Sin embargo, en ese punto vale destacar que las relaciones institucionales con los otros Poderes del Estado Provincial tuvieron durante este período un cariz distinto al de años precedentes. Esto fue analizado desde la óptica judicial como altamente positivo ya que posibilitó contactos permanentes que facilitaron la previsibilidad de la gestión institucional.
El Poder Judicial es sanamente ambicioso para el presente ejercicio. Es consciente que cada día crece la demanda de justicia, y de ahí la preocupación de quienes integran el Superior Tribunal en lograr un presupuesto acorde con esta demanda. Si la buena disposición demostrada por el Poder Ejecutivo en el diseño del actual Proyecto se cristaliza con la correspondiente sanción legislativa, de seguro en los próximos años se avanzará con nuevas concreciones y planes cuyo único objetivo es el de dotar a
A pesar de los problemas que se suscitaron el Poder Judicial no retrocedió, tampoco se detuvo; y para el 2011 avizora, no la solución de todos los problemas, pero sí la posibilidad de encararlos en forma coordinada con los otros sectores públicos, abandonando la idea de compartimientos estancos; lo que seguramente redundará en una más ágil y eficiente Administración de Justicia.