El Juzgado a cargo de la doctora María Gabriela Dadone concretó en el marco del nuevo Código Procesal Penal una audiencia en la que resolvió la libertad a un adolescente aprendido en flagrancia. Se le abrió un legajo de seguimiento para evaluar sus avances.
La titular de la dependencia, doctora María Gabriela Dadone, realizó el pasado viernes 26 su primera audiencia en la OFIJU, luego de que se implementara el nuevo Código Procesal Penal en Goya el 1º de marzo.
En la causa, la magistrada toma contacto con el caso recién al momento de juzgar al adolescente aprehendido en ocasión de robo de un celular.
Se trata de un joven de 16 años que acudió a la audiencia junto a su padre. Estuvieron presentes también la defensa particular del joven imputado, la Asesora de Menores y el Fiscal.
Este último, que es quien solicitó la audiencia, pidió además 5 meses de vigilancia al cuidado de su progenitor.
La doctora Dadone estimó que 3 meses era suficiente, período en el cual, se le abrirá un legajo de seguimiento que permite evaluar aspectos psicológicos y socio-ambientales.
Aplicó así el artículo 232, de medidas de coerción aplicables: “Con el fin de prevenir un peligro de fuga o de entorpecimiento de la investigación, el fiscal podrá solicitar al juez que le imponga al imputado una o varias de las siguientes medidas de coerción: la obligación de someterse al cuidado o vigilancia de una persona o institución determinada, en las condiciones que se le fijen”.
Y ordenó la inmediata libertad del adolescente. La magistrada explicó que este proceso permite tomar contacto inmediato con el imputado adolescente al que además se le da la posibilidad de ser escuchado. En este caso el joven hizo uso de su derecho a no declarar.
Todo el proceso de la audiencia apela a un lenguaje claro, lo que implica que el joven entiende cuales son los cargos que se le imputan y su responsabilidad en el hecho.