Se cubre de esta manera la vacante que había generado la jubilación de la doctora Lourdes Silvero de Bechini.
Los efectivos del Escuadrón 57, asentado en la Laguna Iberá, fueron los principales destinatarios. Se los instruyó acerca de “Sumarios e investigación en delitos específicos de caza furtiva y tenencia y portación de armas”.