A fines de septiembre la Dirección de Informática comenzará de modo progresivo a despedirse de la telefonía caracterizada por centrales telefónicas costosas y complejas. Se trata del mayor cambio en la historia institucional y se propone alcanzar una justicia conectada a través de servicios de comunicaciones digitales.
Se trata de uno de los cambios impulsados por el Superior Tribunal de Justicia como una política estratégica. Incluye la incorporación de servicios de comunicaciones digitales para optimizar las conexiones.